domingo, 22 de febrero de 2009

ADÁN Y EVA  en El Corán.

Tomás Morales Cañedo/Prof. De Filosofía

 

                                    

         He dedicado todas las vacaciones de Navidad a leer El Corán. Quería contrastar ambos libros revelados. Cuando terminé de leerlo comencé a no odiar ni menospreciar tanto a la Biblia.

         Si bien el Antiguo Testamento "se las trae" en cuanto "revelado", el mensaje del Nuevo Testamento sigue fascinándome.

         He dicho "el mensaje" de Jesús. Y una vez más tengo que recordar, "una vez más", que no confundamos, sino que distingamos, entre: 1.- El Jesús Histórico; 2.- El Jesús de la fe o Cristo. 3.- El cristianismo, y 4.- La Iglesia como estructura de poder a lo largo de los siglos.

         Mis lecturas iban encaminadas a estudiar el papel y el tratamiento  que de la mujer dan las religiones "del libro".

         Si bien el Antiguo Testamento, sobre todo en El Levítico, "se las trae", en el Nuevo Testamento, tanto en los 4 Evangelios como en el Primer Pablo, es digno de admiración el trato dado a las mujeres.

         Como resultado de todo este afán salieron varias Conferencias, tal como aparecen en mi www.tomasmorales.es,

 

         La primera de ellas se titula "Reflexiones filosóficas sobre una manzana, la manzana de Eva". En ellas reflexiono sobre la doble versión del Génesis sobre la aparición del hombre en la tierra: 1.- "Dios creó al hombre: hombre y mujer los creó", y 2.- "Dios creó a Adán,….. su soledad y tristeza,….el sueño…. la costilla…. y salió Eva". Y me preguntaba yo por el interés histórico de la jerarquía eclesiástica en incidir, machaconamente, sobre la 2ª versión, la mujer "sacada", no creada, "para" compañía del triste varón.

 

         Tras leer El Corán es tal mi desilusión que no acabo de comprender el fanatismo de muchos (no todos) los musulmanes hasta "morir matando" (no lo llamemos "martirio" porque no estaríamos hablando correctamente. Una cosa es dar la vida por los demás, con el objetivo de que los demás vivan más y mejor, y otra perder, desperdiciar, entregar la vida, matando a los demás, y creyendo que te espera el paraíso. Y que eso es lo que Alá quiere).

 

         El islamismo tomó la leyenda de Adán y Eva del Antiguo Testamento y la adaptó a su manera. La creación de la humanidad se menciona en las siguientes Suras o Azoras:

         4.1.: "¡Hombres!, temed a vuestro Señor que os ha creado  "a partir de una sola persona", de ella creó su pareja y de ambos sacó muchos hombres y mujeres".

         7.189.: "Él es Quien os creó de una única persona y, a partir de ella puso su pareja a fin de que conviviera con ella" o, según otra tradición "para que en ella halle reposo".

         39.8/6: "Os ha creado a partir de una sola persona; luego sacó de ella su pareja.

 

         El varón, pues, es la creación original y las mujeres fueron (no podemos decir "creadas" sino) sacadas, hechas, posteriormente, para el placer y el reposo del varón. O, lo que es lo mismo, la inferioridad de la mujer respecto al varón, y todo esto es "Palabra de Dios", palabra inmutable e incuestionable.

 

         Esto dice Warraq, que pone en boca de Mahoma, "sé amable con las mujeres, porque provienen de una costilla. Y, si intentas enderezar la parte curva de una costilla, ésta se romperá; si no haces nada, continuará curva".

 

         También en otras Suras o Aleyas hay referencias a Adán y Eva.

         2.33/35-35/37. "Dijimos: "Adán, habita tú, con tu mujer, el paraíso. Comed tranquilos donde (o cuanto) queráis, pero no os acerquéis a este árbol, pues seríais injustos (os convertiríais en pecadores). Pero Satán "los" hizo pecar y Dios los expulsó y les quitó el usufructo de aquello que tenían en el paraíso. Les dijimos: descended del Paraíso: los unos por los otros sois un enemigo. Tendréis en la tierra morada y goce temporal".

 

         Ese "árbol", ¿cuál sería, el árbol de la ciencia del bien y del mal o el árbol de la vida? Porque en el Génesis aparecen dos árboles. Si fuera el primero, él árbol del conocimiento, no sería un manzano. No habría manzana que Eva hubiera podido comer y, luego, invitado a Adán, sino una parra, la vid, de ahí que Alá haya prohibido a los musulmanes beber vino. O sea, que Alá preveía que podrían emborracharse y perder el juicio, el "conocimiento", o, por el contrario, que en ese estado de embriaguez pudieran acceder a esa otra dimensión cognoscitiva superior. (Aunque, por lo que he leído, para otros comentaristas el árbol prohibido era una higuera). Lo que nunca hubiera podido ser era un manzano, por la sencilla razón de que en el actual Irak, donde habría estado ubicado el paraíso, no existían, entonces, los manzanos).

         Lo más probable es que ese "árbol" sea el segundo, el árbol de la "vida", al menos eso es lo que puede deducirse de 20.118/120: "pero el demonio "le" tentó. Dijo: "¡Adán!, te guiaré al árbol de la eternidad y del señorío que no envejece".

         Es curioso. La serpiente no tienta a Eva y luego ésta invita a Adán, sino que es Adán, directamente, el que come la fruta prohibida.

         Aunque en 7.19/20 dice: "pero Satanás "los" tentó…. Y dijo: "Vuestro Señor no os ha prohibido este árbol más que por temor de que fueseis dos ángeles o inmortales".

         Y más adelante, en 20.119/121, "Ambos comieron de él. Aparecieron sus vergüenzas y empezaron a cubrirlas con hojas de los árboles del paraíso". Ambos desobedecieron, pecaron, se extraviaron, se desviaron del buen camino, pero… 120/122, "después su Señor "lo" escogió, "lo" perdonó y "lo" dirigió".

         ¿Y Eva? ¡Ah!, no aparece, ¿todavía sigue perdida, extraviada, pecadora…?

 

         Dios castiga a Adán y a Eva por desobedecer sus órdenes. Siempre el gran pecado de la desobediencia de los súbditos hacia sus señores, sean cuales sean las órdenes dadas. Pero, como acabamos de ver, y a diferencia del Antiguo Testamento, en estas aleyas o versículos no hay indicio alguno de que fuera Eva quien condujera a Adán por el mal camino y fuera la causante del descarrío de ambos. Ella no aparece como la inductora. Pero la pregunta surge: ¿"por qué, después, toda la tradición musulmana creó el mito de Eva como la tentadora"?.

         Al igual que en el cristianismo ella, también en la tradición musulmana, sería la causante primera del pecado en el mundo.

         Según Warraq el mismo Mahoma habría dicho: "si no hubiera sido por Eva, ninguna mujer habría sido infiel a su marido". ¿También es Eva la causante de que la vecina del 5º le ponga los cuernos a su marido con el repartidor de butano?

         ¿Saben Uds. qué era el "chivo expiatorio"?.

         Aquí tienen Uds. a la mujer, maliciosa y engañosa, no circunstancialmente, sino en esencia.

         Ya podemos explicar por qué el mundo anda como anda, desde el principio.

         Hemos dado con la solución al problema planteado.

         Ya podemos descansar tranquilos.

         La misoginia está servida.

         Acerquémonos al banquete.

         Participemos en él.

 

 

              Enero de 2009

2 comentarios:

Anónimo dijo...

Si el Papa hubiera sido Papisa y los ayatolas fueran ayatolasas y las religiones no fueran reidas, ideadas y gozadas por machos, la tentación no hubiera sido de Eva, sino de ambos a la vez y a coro. El hombre y la mujer ejercen sus actos por su propia voluntad, y acatan o no voluntades ajenas por su propia voluntad, no forzados por "serpientes" ajenas.

Anónimo dijo...

En mi comentario anterior escribí que "las religiones no fueran reidas...", quise decir regidas, disculpen.