sábado, 4 de noviembre de 2017

EL COBARDE PUIGDEMONT

Ángel Pulla Dijort/Málaga

 

"No culpen a Lamela, y mucho menos a Rajoy. Quien los ha llevado a prisión se llama Puigdemont. Él es el traidor, él ha sido su peor fiscal. Primero, saboteando su propio acuerdo y conduciéndolos a cometer delitos flagrantes contra la convivencia y el orden democrático; después, poniéndolos a los pies de los caballos con su grotesca fuga. Viendo a la nave capotar, el piloto Puigdemont agarró el único paracaídas a bordo y se tiró. Es lo que pasa cuando pones a un pelele: se le puede manipular, pero en el momento de la verdad se quiebra como lo que es." (Ignacio Varela, articulista)

Nunca hubiera sido capaz de imaginar lo  que después hizo realidad el "honorable" cuando vio venir al lobo: abandonar a su gente, a sus ayudantes de los que él debía responder, y salir por pies – quién le paga esos gastos y andanzas – y dejar en brazos de la ley a los demás. ¡Qué poca hombría y cobardía la suya!

Ya tenemos "caganet" para el belén este año.

No me ha gustado el quehacer ni la postura del presidente Rajoy en estos últimos años, cuando todos veíamos lo que iba a suceder. Todavía menos me ha gustado cuando he oído al señor Duran  i Lleida comentar que hace tres años, él le comentó al señor Rajoy lo que estaban preparando en el Gobern de Catalunya con el objeto de que tomara las correspondientes medidas para evitar lo que, desgraciadamente, ha sucedido.

¡Cómo se puede ser tan imbécil y tan mal político!

Pero esto no disculpa que el cobarde de Puigdemont haya ido engañando a todos cuantos han confiado en él y en sus "acólitos" cantando y contando las innumerables mentiras sobre los triunfos que les esperaban y sobre todas las naciones europeas que ya les habían prometido sus apoyos y…, bueno todo eso que sus "embajadores" – los de Cataluña en el extranjero – les tenían prometido.

Entre esos embajadores estaba, por ejemplo, la hermana de Pep Guardiola. Y el dinero para esas embajadas ¿de dónde salía? Por supuesto que pertenecía a otras partidas que perdían sus fondos para el beneficio de los ineptos servidores del señor Puigdemont y adláteres.

Sí hay algo que debemos tener en cuenta, y es que de toda esta "charlotada" ha beneficiado a otros entes que nadie ha sacado a relucir todavía, pero que ellos mismos se han retratado de inmediato. Miren bien a la alcaldesa de Barcelona, Ada Colau.  

Hasta poco más de un año, me caía bien esta señora. Desde un tiempo para acá le comenté a la familia que la señora Colau buscaba la presidencia de la Generalitat. Y no falla. Os copio parte del artículo de Ignacio Varela referente a esta señora.         

"Se ve de lejos su propósito de aprovechar la orfandad dirigente del soberanismo para hacerse con el chiringuito y que, además, se lo agradezcan. Lleva años invirtiendo en ello y poniendo fichas en todas las mesas de la ruleta, y esta es la ocasión de hacer caja. Puede que junto a la bancarrota de Puigdemont –o precisamente gracias a ella– se produzca el pelotazo de Colau." (Ignacio Varela)

Lo peor es que se va a encontrar con mucha competencia, hay varios que suspiran por el mismo puesto. Y alguno puede hacerle un competencia feroz y desde el mismo punto de ella o muy cercano.   

Por otra parte, no llego a entender que personas que se supone formadas, admitan y defiendan como algo irrefutable una fantochada como la del 1-O con aquel cura celebrando misa – o lo que estuviera haciendo – que presidía, se supone que en nombre de  dios, aquella orgía de votos y sin control, ni listas, ni nada, y aquellas votaciones por triplicado y cuadruplicado hechas por distintos periodistas para comprobar la seriedad de sus votaciones, aquellas urnas llevadas en coches y que alguna que se cayó al suelo y ya iba "preñada" de votos ¿de quién y cómo y cuándo?

Y eso lo defienden como inicio de su mandato para independizarse.

O aquella otra votación, con la mitad del parlamento ausente y cambiando varias veces de sistema, según veían si convenía que fuera de una u otra forma, para evitar que pudieran ser controlados los que votaban en uno u otro sentido.

No han podido hacerse peor las cosas. Imposible, por una y otra parte. Pero lo de este huido presidente, llegado al poder de rebote y puesto por sus adversarios de la CUP, aunque después fueran sus cómplices, no  hay por dónde cogerlo, no me extraña que sus propios seguidores gritaran aquello de "Puigdemont traidor", aunque yo prefiero lo de "Puigdemont cobarde".     



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