lunes, 29 de junio de 2009

FIARSE…¿DE QUÉ O DE QUIÉN?

Ángel Pulla Dijort/Málaga

 

 

He recibido de mi amigo Andrés un artículo de Javier Marías, publicado en la revista de El País del domingo día 7 de junio, titulado "Por qué casi nadie es de fiar". Me pide un comentario…, o dos…

 

Bueno, lo he leído. La verdad es que ya lo había leído con anterioridad. Lo leí ayer. Y ahora, aprovecho que Pepa se ha ido con las amigas a andar por el paseo marítimo, por aquello del colesterol, que Arantxa está en su trabajo, y que aquí solo quedamos Luna, El Gorilillo y yo para iniciar la meditación necesaria para contestar al correo de mi amigo.

 

Como estoy solo hago mis comentarios en voz alta. Luna, tumbada a mi lado, en el suelo, de vez en cuando levanta la cabeza, me mira, no adivino lo que piensa, aunque me pone unos ojos así como de "qué estará diciendo este para despertarme de mi siesta" y sigue dando sus cabezaditas en el suelo.

 

 El que me tiene mosqueado  es El Gorilillo. Se asoma a la puerta de su dormitorio en la jaula, me mira, me huele, se frota la cara con sus manecillas, vuelve otra vez a mirarme, se frota de nuevo la cara…, yo creo que es que se está riendo de mí y lo disimula frotándose la cara con las manos. Este es un caradura…

 

Debo aclarar quien es este caradura, que creo que me toma el pelo, se ríe de mí, disimulando con sus frotes de manos en la cara. Este es un ratoncillo ruso, pequeñito, que se pasa el día metido en su habitación, tapado hasta los ojos con algodón, que él mismo se va colocando encima, y por la noche sale a comer, beber, y darle vueltas al rodete como loco, corriendo sin moverse del sitio. Este es el caradura que se me queda mirando cuando comento mis cosas, y entre Luna que dormita y él, que se asombra o algo así, estoy comentando el artículo de J. Marías.

 

No cabe duda de que esas cosas que algunos dicen, probablemente sea cierto, eso de que algo "está por encima de", refiriéndose a estamentos, clubes, asociaciones, partidos políticos, países, etc. son difícilmente defendibles por personas que  no entendemos mucho esos "por encima de" que él comenta.

 

Qué tengo yo o considero yo por encima de mí. Depende. Depende bajo qué especto o punto de vista lo considere.

Físicamente, considero que hay mucha gente por encima de mí. ¿está claro, no? De cualquier forma, el que haya muchos que físicamente estén por encima de mí, no conlleva el que yo deba responder con admiración o considere algo superior a mí por parte de estas personas. Simplemente me superan en lo físico. Ni más ni menos.

 

Económicamente, los hay a montones por encima de mí. Tampoco me quejo de mi suerte.

 

Intelectualmente, desgraciadamente también los hay. Muchos. Esto sí me duele, y por este asunto sí puedo llegar a considerar a alguien "superior" a mí. Aunque no por ello le deba ningún tipo de vasallaje, adoración, ni nada por el estilo. Admiración, sí.

 

Profesionalmente me hubiera gustado haber podido comprobar, en los últimos años,  que punto de satisfacción o de perfección podría haber conseguido en el desempeño de mi desarrollo profesional. Pero fue imposible…

 

Lo que sí encuentro por encima y veo como algo superior y por lo que daría algo, es por conseguir un desarrollo intelectual, personal y profesional insuperable. Esa es mi entelequia.

 

De cualquier forma, lo único que yo encuentro que merezca la pena ese "dar todo", ese "por encima de cualquier cosa", ese "daría todo", lo único que a mi modo de ver merece la pena esto, es mi familia. Nada más.

 

Yo, al igual que Javier Marías, no tengo ninguna confianza en estas personas que pregonan que por encima de todo está "ese amor", "esa lealtad", "esos colores"… A mí no me resultan muy fiables esos juramentos, ni esos besos a los escudos, ni esos amores laborales…

 

Todo lo que pueda ser medido al mismo tiempo en dinero, honores, premios, ascensos, etc. Todo lo que no pueda ser medido solamente en una única moneda, es sospechoso de no ser real, incondicional, verdadero.

 

Siempre que ves esos alardes de arrojo, de amor y de entrega de alma, te da la impresión de que suena algo a hueco. Suena a estribillo de copla española, de las folklóricas españolas que todas sacaban de entrada todas sus "entretelas" en sus canciones o declaraciones, y que sonaba a eso, a dichos huecos, sin nada dentro… palabras, palabras, y solo palabras…

 

 

Desde hace tiempo, siempre que oía a estos "ligones profesionales", estos que lo hacían a lo galán de cine (ahora ya no se lleva, pero cuando yo era un chaval, era lo que triunfaba). Pues cuando veía a algún galán dedicando esas bellas palabras a una señorita, tenía la absoluta seguridad de que a la menor ocasión que tuviera, la dejaba tirada. Si ella admitía como buena la "diatriba", y aceptaba sus condiciones, estaba declarando su rendición inmediata y su posterior  abandono o  sumisión al mismo.

 

Nunca me he fiado de estos personajes de verbo fácil y agasajador, siempre los he considerado poco acordes con sus hechos. "Hechos son amores y no buenas razones". Estos sí tienen algo "por encima de todo". Su propio beneficio, sin más.  

 

 

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