lunes, 15 de junio de 2009

UN REVUELTO

Tomás Morales Cañedo/Prof. Filosofía

Mayo 2009                                       

 

                                                                 

         Hay muchos tipos de paternidad (social, psicológica, académico-educativa, afectiva…) y una de ellas, a la que más importancia le da la legislación, es la paternidad biológica.

         La paternidad biológica es la más "tonta" de las paternidades. Basta "echar un polvo", o que "te lo echen" sin prevención, con una persona del sexo contrario, y ya está. Mi espermatozoide y tu óvulo, o viceversa, sin contar ya con nosotros, siguen su curso y, si todo transcurre normal, a los nueve meses, ¡ya está! Ya soy/eres padre/madre biológico/a.

 

         Decir, realmente, que tener un hijo es convertirse en padre/madre es como afirmar que soy pianista porque en mi casa tengo un piano.

         Tener un hijo o tener un piano son condiciones necesarias, pero no son suficientes.

 

         Y ya que hablamos de "niños".

 

         Un niño es un "anciano en potencia" pero no por ello tiene derecho a la pensión de jubilación.

         Un hombre vivo es un "cadáver en potencia", pero no es lo mismo enterrar a un hombre vivo que a un cadáver.

         Los huevos son "gallinas en potencia" y un vegetariano comerá huevos, aunque no gallinas.

         Un embrión es un "hombre en potencia" y, por tanto, eliminar un embrión no es matar a un hombre. Por lo tanto, el aborto no debería ser considerado un homicidio.

 

         Suele decirse, demagógicamente, que si mis padres hubieran matado el embrión del que yo salí, hoy no estaría aquí, hablando de estas cosas.

         Pero, seamos sinceros, tampoco estaría yo aquí si mis padres hubieran considerado el sexo como pecado de la carne y hubieran prometido y ejercido la castidad.

 

         Si de lo que se trata es de incrementar la población, para que haya más hijos de Dios en la tierra, tanto los abortistas, por no permitirlo, como los castos, por no intentarlo, tendrían responsabilidades ante Dios.

 

         En los tiempos actuales, el preservativo debería ser obligatorio tanto para evitar que vengan hijos no deseados como para evitar enfermedades, entre ellas el sida.

         O lo que es lo mismo, oponerse al preservativo es estar, realmente, a favor de la miseria futura y del malestar y posible maltrato ante un intruso que se presenta sin ser invitado, y estar a favor de la enfermedad.

         Argumentar que la solución es la castidad es un mensaje marciano.

 

         El aborto es, siempre, para todas las mujeres que lo practican, un trauma. No es un pastel que se disfrute.

         Ninguna mujer quiere quedarse embarazada por el placer de, luego, abortar.

 

         El divorcio, el aborto, la policía y los bomberos se inventaron para cuando fallan las cosas. Son instrumentos, creaciones humanas, que vienen a solventar problemas.

 

         ¿Cuáles son los argumentos para la ley del aborto (tanto la actual, como la proposición de la futura ley de plazos?

 

         Los entendidos exponen varios argumentos:

 

         1.- Argumento económico (los padres consideran que no pueden soportar la carga económica que supone la venida de un hijo no deseado).

         2.- Argumento psicológico (el trauma que va a producir en el padre/la madre, la merma de salud mental, la inestabilidad emocional que repercutirá sobre la misma persona, sobre su pareja, sobre el hijo sobrevenido). Más todavía si el embarazo ha sido la consecuencia de una violación.

         3.- Argumento político (el partido ganador, en unas elecciones, que llevaba en su programa la ley del aborto y ha conseguido la confianza de la mayoría de los electores).

         4.- Argumento científico (el embrión no puede ser considerado "persona" al no gozar de "autonomía", por lo tanto no puede ser sujeto de derechos (de lo que no debe concluirse que deba ser siempre eliminado por todos, sino que "pueda serlo" por quienes así lo deseen o lo necesiten).

         5.- Argumento jurídico (que la ley no es anticonstitucional, que no se opone a los Derechos Humanos,….)

         6.- Argumento ético (por el bien de ese niño que puede venir, para librarlo del infierno en que se va a encontrar).

         7.- Argumento religioso (que sólo afecta a los creyentes en esa religión que lo prohíbe o que lo ordena o que lo permite).

 

         Anímense, por favor, y dialoguen, propongan argumentos a favor o en contra,  "propongan", no impongan, no obliguen ni prohíban, intenten convencer al adversario (nunca enemigo) de que su argumento racional es el que más pesa en la balanza de los motivos.

         No esgrima sus creencias. Éstas son valiosísimas, pero sólo para Ud. Las creencias son privadas e íntimas.

 

1 comentario:

Angel dijo...

Te falta un argumento. El principal. Cada uno (una en este caso) es dueña y señora de hacer lo que le da la gana con su cuerpo. Y la señora que ha quedado embarazada sin desearlo, y no desea ser madre, está en su perfecto derecho de no ser madre.
Lo mismo opino del que desea que nadie le alargue la vida cuando no se le puede ofertar más que vida vegetativa.
Cada persona. en pleno uso de sus facultades, es dueño absoluto y responsable de sus actos.