jueves, 10 de octubre de 2013


LA HEROICIDAD OBLIGATORIA.

Tomás Morales Cañedo

 

¿Sacrificar tu bienestar, tu vida, incluso la vida de tu familia, por el bienestar y la vida de los demás?

Eso sería ser un héroe.

Pero la heroicidad ¿debe ser voluntaria u obligatoria?

A cualquiera se le puede exigir que obre humanamente ¿pero un esfuerzo sobrehumano, incluso con pérdidas y pérdida de la vida propia?

 

Mutando el dicho de "primum vivere, deinde philosophare", podríamos decir hoy: "los primero es sobrevivir, después el heroísmo", lo que conllevaría una peor calidad de vida, al dar parte o todo de lo poco que tienes en benefició de los demás.

 

Se puede/se debe exigir el deber ciudadano para cooperar al bien social, ¿pero un superdeber o un deber añadido?, ¿un deber extraordinario, superior, al deber normal y ordinario?

 

Hoy nos presentan a un héroe y, muchas veces, en vez de causarnos admiración mostramos reticencia y nos causa sospecha sobre la intención oculta de ese esfuerzo sobrehumano.

Los que somos "normales" sospechamos de los "supranormales", porque los medimos con nuestro propio rasero, así que desconfiamos de ellos y de su actuación heroica.

 

¿Sacrificar satisfacciones individuales y/o familiares que me ha costado conseguirlas, en vista a objetivos colectivos a conseguir?

Justificaremos nuestra negativa a imitarlo y /o nuestra cobardía con subterfugios varios.

Si somos capaces de sospechar y de negar la pretendida altura moral del héroe justificaríamos  nuestra "normal moralidad" y podríamos quedarnos tranquilos, sin remordimientos de conciencia.

Si creemos poder desenmascarar, bajo las grandes palabras que encubren una causa colectiva el porqué de quien ello defiende, dormiremos tranquilos.

"Eso lo dice porque….." pero no es que sea verdad.

 

¿Pondrías tu vida en peligro por defender el Derecho de las mujeres en una sociedad altamente androcéntrica?

Y quien dice "el Derecho de las mujeres" dice "la libertad religiosa", "la eliminación de la pena de muerte por ser homosexual o por adulterio de la mujer",… ¿Debería ser, en estos casos, obligatorio un acto de heroísmo?, ¿o sólo optativo?

 

Aunque veamos al héroe como una persona merecedora de alabanza, al no considerar la heroicidad como obligatoria, no será, al menos, merecedora de reproche la conducta no heroica.

Lo supranormal admirable no debe llevar al desprecio de la normalidad, porque "ésta es la norma".

 

Todos "debemos obrar correctamente", pero es que la heroicidad es un supradeber, por lo tanto no exigible. Admirable sí, pero no obligatorio.

Los actos "excepcionales" son eso, "excepciones" a la norma, a la regla. ¿No solemos decir que "la excepción confirma la regla"?, pues los que cumplimos con la regla…

"Dar lo que debe darse" es la norma, "dar más de lo que debe darse" es la excepción. Además, si todos fuésemos "excepcionales", "excepciones", no habría regla.

¿Debemos sentir remordimientos de conciencia cuando no cumplimos lo que no es obligatorio, ni exigible?

¿Se le puede exigir, en ciertos casos, al "normal" un plus más allá de esa normalidad obligatoria?

¿Sería injusto exigirle a alguien que vaya más allá de los límites de la justicia?

 

"Cumplir con el deber" es lo normal, esa es la "persona cumplidora", pero la "persona virtuosa" va más allá de cumplir lo obligatorio. El virtuoso estira más la goma, "da más de sí".

 

Mientras la Ética del Deber se centra en la Norma, la Ética de la Virtud hace referencia al carácter excepcional del sujeto.

Mientras la "persona cumplidora" cumplirá con su deber, la "persona virtuosa", además de cumplir con la norma, traspasa su límite.

 

A quien cumple con su deber, pero sólo con su deber, no se le puede llamar "inmoral", pero sí se le puede calificar como "poco virtuoso" por  lo que, en situaciones extraordinarias, deja de hacer, sin ser exigible ni obligatorio que lo haga.

Ser una "buena persona" no implica que no se pueda ser "mejor persona" todavía.

Eso es lo que es el héroe, la persona virtuosa, una "mejor persona"

1 comentario:

Angel dijo...

¡Qué pocos héroes hay en la vida "de diario".
En la milicia, sí los hay, pero como decía el coronel de mi cuartel, la mayoría de los héroes lo son por error.